Reseña de «Tomates verdes fritos», de Fannie Flagg

Título: Tomates verdes fritos
Autor/a: Fannie Flagg
Género: Histórica
Publicación: 1/1/1987 (original en inglés) 1/6/2011 (español)
Editorial: Capitan Swing
Páginas: 488
Puntuación: 

Puntuación: 5 de 5.

Sinopsis

Evelyn Couch es una mujer de mediana edad que vive una existencia gris, acomplejada y  frustrada con todo lo que la rodea. Sin embargo, su forma de ver la vida cambia cuando, tras una visita al asilo donde reside su suegra, conoce a la señora Threadgoode, que comienza a contarle historias de un pequeño pueblo llamado Whistle Stop, cuya vida giró un tiempo en torno a un café. De pronto, a Evelyn se le abre una luminosa ventana al pasado por la que entra un aire de una frescura desconocida para ella. Remontándose a finales de la década de 1920, la señora Threadgoode (Ninny) explica historias cuyas protagonistas son Idgie y Ruth, dos espíritus sensibles, alegres y llenos de una admirable energía vital, que saben sobreponerse a las dificultades y saborear el gusto por la vida. 

Quería leer este libro antes de ver la película, de la que hay muy buenas críticas, pues es algo que me gusta hacer siempre que me entero de que una película está basada en un libro (especialmente si es antes de verla 😅). 

Tomates verdes fritos ha sido un libro que me ha fascinado de principio a fin, ¡no quería que se acabase! La trama, los personajes, el ambiente, en su mayoría acogedor, me han encantado, por ello mi puntuación es de 5 estrellas.

Fannie Flagg logra contar una tierna historia de amistad, amor y solidaridad a la vez que muestra las partes malas y duras de una época oscura de EE.UU. Todo ello sin que se sienta impostado o desencajado. Al contrario, se nota un equilibrio y no hay un ahondamiento en esa oscuridad, sino que prima la luz y el optimismo.

Durante la lectura de esta novela, en su mayor parte, estaba con una sonrisa en los labios, soltaba algunas -varias- carcajadas y moría de ternura y de amor, pero también sentí rabia, impotencia y tristeza por las partes más feas que se relatan, y el final me partió un poquito el corazón, me llenó de nostalgia y me sentí un poco vacía, quería volver a esa historia y a esos personajes (los extraño) ❤️‍🩹

Tomates verdes fritos aborda temas como la discriminación de la mujer, el racismo, el lesbianismo, la miseria o el alcoholismo y, a pesar de eso, es una novela optimista, en la que, como he dicho antes, predomina la alegría y la superación. Y temas como la amistad, la solidaridad y el amor tiene una gran potencia.

La trama de esta novela puede parecer sencilla, pero en realidad tiene una gran complejidad por todos los asuntos que se tocan, que son muy verosímiles. Me ha encantado eso, pues nos muestra una visión más completa de la época y dan más profundidad a la trama y a los personajes. Principalmente la historia se desarrolla en un pueblo de Birmingham, Alabama, Estados Unidos, durante finales de los años 20 y los 60-80 aproximadamente. El desarrollo del argumento es progresivo, expuesto en dos líneas temporales: por un lado, los sucesos en los años 80, en la que conocemos a Evelyn Couch y cómo conoce a Ninny Threadgodge; y por otro lado, los hechos ubicados entre los años 20 y los años 60 que describen la vida de la familia Threadgodge y los habitantes de Whistle Stop.

Por otra parte, hay un muy bien ritmo y tensión narrativa en el libro. Las voces narrativas se relatan con diferentes personas, perspectivas y recursos literarios. Predomina el narrador en tercera persona, pero también recurre al estilo epistolar, todo ello me parece muy original y da frescura a la lectura.

Respecto a los personajes, tanto los principales como los secundarios son importantes, en uno y otro momento de la historia los secundarios son clave. En esta novela encontramos personajes complejos, diferenciados, muy variados y con un gran desarrollo. Me parecieron super interesantes todos, no dejan indiferente, pero mi favorita sin duda fue, y es, Idgie: la amé, la amo y la amaré siempre ❤️.

El estilo de la autora es sencillo, atrayente, con sentido del humor, claro y ameno. Lo que más me llamó la atención es su capacidad de atraparte y sumergirte de lleno en la novela, haciendo que no quieras dejar de leer ni que se acaba todo.

En conclusión, Tomates verdes fritos me ha encantado, se va directo a la lista de mis libros favoritos. Sin duda volveré a releerme esta hermosa historia que no olvidaré, espero que la película esté más o menos a la altura.

Y a vosotr@s ¿os gustó el libro? ¡os leo!

P.D: os pido que si hacéis algún comentario con spoiler lo advirtáis antes, podéis poner: ¡spoiler! + vuestro comentario.

¡Gracias!

Y dijo Ruth: No permitas que te abandone, ni que deje de seguir tus pasos. Pues dondequiera que vayas, iré; dondequiera que mores, moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios.

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